España
Cuidado con el sol
Cuidado con el sol
ASISA reparte protectores solares en zonas costeras para facilitar el acceso a este tipo de productos e informar sobre su adecuado uso y beneficios
06/08/2013 -
ASISA ha lanzado una campaña de concienciación para informar sobre los
riesgos del sol y ofrecer consejos sobre qué medidas tomar para evitar el daño
solar. Esta iniciativa se ha puesto en marcha en zonas costeras, donde se
entregan muestras de protección solar que incluyen esta información.
La delegación de ASISA en Almería ha sido pionera en esta iniciativa, que,
tal y como explica el delegado de la compañía el Almería, Dr. José Tara, tiene como “objetivo concienciar
a la población de que tomar el sol puede ser beneficioso o peligroso, en
función de si se siguen o no unas normas de protección adecuadas”.
Los dermatólogos de ASISA recuerdan que el sol emite rayos ultravioleta
(UV) que pueden dañar la piel. Este peligro se produce cuando hay una
exposición que excede la capacidad del pigmento protector del cuerpo, la
melanina. Las consecuencias pueden ser entre otras, ampollas, edema o fiebre.
Los rayos UV no sólo pueden causar lesiones en la piel, también en los ojos,
arrugas, manchas e incluso puede provocar cáncer.
Sin embargo, exponerse al sol siguiendo unas reglas puede ser muy saludable.
ASISA quiere recalcar el aspecto positivo que tiene disfrutar de más horas de
luz y sol durante el periodo estival, pero haciéndolo con las máximas medidas
de seguridad.
Las recomendaciones de ASISA para protegerse del sol pueden resumirse en 5
fundamentales:
- Observar el tipo de piel de cada individuo para determinar cuál es el
factor de protección solar que le conviene. Este puede variar entre el
10 y el 50 pero, a no ser que sea de piel muy oscura o negra, nunca se
debe utilizar un factor más bajo del 20.
- Además, debe evitarse exponerse al sol en las horas
en que éste es más dañino, entre las 11:00 y las 16:30 horas.
- Los protectores solares en todo caso deben contener las palabras UVB, que indica que protege
contra la radiación ultravioleta B causante de las lesiones cancerígenas, y UVA, que protege contra la
radiación ultravioleta A, principal factor del envejecimiento prematuro de
la piel.
- Los protectores deben aplicarse en casa, media hora antes de salir, es importante aplicar una
cantidad que cubra bien la piel, y repetir la aplicación cuando ya se
lleva un rato expuesto al sol, ya que pierde su propiedades al bañarnos y
con el sudor.
- Tomar el sol debe hacerse de forma progresiva, exponiéndose las primeras
veces sólo unos minutos e ir incrementando el tiempo poco a poco. De esta
forma se consigue que la piel no sufra una exposición muy prolongada sin haber
activado sus mecanismos de defensa.
- Es imprescindible también hidratarse adecuadamente, beber
líquidos de manera constante y protegerse la cabeza para evitar
insolaciones, desmayos o dolores de cabeza.
Especialmente
vulnerables a estos peligros son los niños a los que, como indica la
dermatóloga de ASISA, Dra. Esther Juárez Morales, deben protegerse a conciencia
ya que “se sabe que las quemaduras que se sufren en la infancia aumentan el
riesgo de padecer cáncer de piel. De hecho, algunos estudios indican que más de
tres quemaduras en los niños multiplica por diez las posibilidades de padecer
cáncer de piel”.